¿Joven para siempre? El costo de literalmente mantener la cabeza en alto

Millennials, pueden retrasar los marcadores tradicionales de la edad adulta todo lo que quieran, pero a su cara no le importa si han comprado o no su primera casa. Sin embargo, sí importa la frecuencia con la que tomaba el sol y fumaba cigarrillos en su juventud.

Ciertamente puede lucir esas líneas finas y canas con orgullo. Después de todo, envejecer es un regalo. Pero está bien querer ralentizar el proceso para parecer tan joven como se siente. Y por eso, los millennials están adoptando procedimientos cosméticos que requieren poco o ningún tiempo de recuperación. Según un artículo de enero de 2020 en el Journal of Drugs in Dermatology, los millennials gastan 2 a 1 más que los baby boomers en cuidados personales, incluida la medicina estética. Los adultos más jóvenes, afirma el artículo, han adoptado la tendencia del “prejuvenecimiento”: someterse antes a procedimientos menos invasivos, como inyectables, para hacer retroceder la necesidad de procedimientos cosméticos más intensos en el futuro.

Sin embargo, congelar y rellenar el rostro tiene un costo, especialmente porque es necesario recibir estos tratamientos de forma continua para mantener el efecto. Este no es un compromiso pequeño. Cada visita al consultorio del dermatólogo puede costar unos cientos de dólares.

El costo promedio actual de las inyecciones de toxina botulínica (esto incluye Botox, Dysport, Jeuveau y otras marcas) es de $528, según la Sociedad Estadounidense de Cirujanos Plásticos, (ASPS, por sus siglas en inglés). Los tratamientos de relleno dérmico, incluidos Juvederm Ultra, Voluma y Restylane, comienzan en un promedio de $794. El rejuvenecimiento cutáneo con láser, que aborda preocupaciones como las cicatrices del acné y el daño solar, cuesta un promedio de $1,489.

Pero los precios varían según dónde viva, qué tratamientos elija y quién realiza los procedimientos. Esté preparado para pagar más si vive en una zona de alto costo (en inglés).

Tenga en cuenta que ninguno de estos son procedimientos únicos si está satisfecho con el resultado y desea continuar. “El proceso de envejecimiento nunca se detiene”, dice el Dr. Chris Adigun, dermatólogo de Chapel Hill, Carolina del Norte. “No importa lo que haga, lo seguirá haciendo por un tiempo”.

Cuidar su piel puede retrasar la aparición de problemas como líneas finas y daño solar. “No se puede exagerar la importancia de la calidad de la piel. Es más probable que le salga esa línea en la piel si está deshidratada y frunce el ceño”, dice el Dr. Mary Lupo, dermatóloga de Nueva Orleans. “Sí, el Botox ayuda a evitar que las líneas grabadas se queden grabadas, pero la calidad de la piel es lo más importante”.

Algunos buenos hábitos no cuestan nada: no fumar, limitar el consumo de alcohol, mantenerse alejado del sol y dormir boca arriba para evitar aplastar la cara contra la almohada.

Su régimen de cuidado de la piel no tiene por qué ser demasiado complicado. Puede seguir una trifecta de protector solar, retinol y suero de vitamina C, según el Dr. DiAnne Davis, dermatóloga de Dallas. Estos productos están disponibles en una variedad de precios y puede optar por marcas de farmacia si los productos de alta gama no están dentro de su presupuesto (en inglés).

Lupo recomienda llevar sus productos a su dermatólogo para conocer su opinión. Es posible que, sin darse cuenta, esté utilizando dos productos que anulan los beneficios del otro, lo que sería una pérdida de dinero.

Si está preparado para procedimientos más intensos, existen formas de gastar sabiamente. (Y si se lo pregunta, no, para tratamientos estrictamente cosméticos no puede aprovechar los ahorros fiscales de una cuenta de salud o de gastos flexibles (en inglés)).

Primero, trabaje con su dermatólogo para elaborar un plan de tratamiento que cumpla con sus objetivos y su presupuesto (en inglés). Un inyector experto puede brindarle una visión honesta sobre qué tratamientos puede omitir o usar a la ligera por ahora. Según Lupo, el exceso de relleno cuando es joven puede hacerle parecer mayor. Según ella, una sola jeringa inyectada estratégicamente puede tener un impacto notable.

Únase a la lista de correo electrónico de su práctica de dermatología para recibir notificaciones sobre ofertas especiales. A veces, productos o servicios específicos salen a la venta, o es posible que pueda abastecerse de tarjetas de regalo (en inglés) con descuento para tratamientos futuros.

Davis desaconseja los dispositivos para el cuidado de la piel que permiten realizar tratamientos usted mismo en casa, como plumas de ácido hialurónico que puede inyectar en su propia cara. Estos dispositivos pueden costar cientos de dólares y pueden no ser tan efectivos como los tratamientos en el consultorio. Puede parecer que está ahorrando dinero, pero sería mejor gastar ese dinero en manos de un profesional.

Los dermatólogos se centran en la calidad de la piel, pero para algunos problemas estéticos, un cirujano plástico podría ser más apropiado y, por el costo, es más probable que obtenga el resultado deseado.

Tanto Davis como Adigun sugieren la cirugía plástica (en inglés) cuando los pacientes quieren tratar la piel flácida, mientras que Lupo la recomienda cuando un paciente necesita que le arreglen la nariz por cualquier motivo, tiene bolsas de grasa severas debajo de los ojos o quiere corregir una mandíbula hundida con cirugía o un implante de mentón.

Incluso después de la cirugía plástica, aún puedes optar por trabajar con un dermatólogo en otras cuestiones cosméticas. “Es una asociación. Amo a mis cirujanos plásticos”, dice Adigun. “No puedo hacer lo que hacen ellos. Los necesito.”